Con los primeros rayos de sol del sábado 16 de mayo, un grupo de 13 personas de varias entidades que comparten el propósito de ayudar a quienes más lo necesitan durante la pandemia COVID-19 en Colombia se dieron cita en el aeropuerto José María Córdova de Rionegro.
Con los pasillos vacíos, como no es habitual, caminaron ya equipados con un traje que los aislaba del entorno, un requisito indispensable para viajar al Amazonas, un destino paradisíaco pero que a su vez es uno de los puntos críticos en materia de contagio y afectación por la pandemia.
Abordar un avión comercial que en esta oportunidad estaba cargado con 10 toneladas de insumos médicos y ayudas alimentarias fue una situación que difícilmente se va a repetir en la vida para estos viajeros. Los sentimientos encontrados a flor de piel eran evidentes, sonrisas, ambiente de camaradería, ansiedad por llegar a extender apoyo a quienes viven la incertidumbre de un confinamiento que no detiene la propagación del virus.
Durante el vuelo que duró alrededor de una hora y media, solo pensaban en llegar a entregar las ayudas y aportar un grano de arena para que esta población geográficamente lejana pero que llevamos en el corazón los colombianos, puedan superar esta crisis.

El avión tocó tierra y de inmediato se pusieron manos a la obra, los instructores del SENA se dedicaron a las jornadas de capacitación del personal médico y funerario, en buenas prácticas de pacientes COVID-19, otra manera de salvaguardar a quienes prestan estos servicios.
Los insumos médicos fueron entregados en los hospitales de Leticia y Puerto Nariño, los dos centros de salud más grandes de la zona y los que sin importar las condiciones están llamados a atender a los contagiados.
Otra parte del equipo viajero entregó los kits de alimentación dirigidos a la población más vulnerable y al personal de diferentes compañías entre las que se destaca Bancolombia que hoy apoya de manera incondicional esta y otras campañas.
Finalmente la jornada fue satisfactoria, se cumplió el objetivo y a pesar de la distancia y la precariedad de la realidad que ha tocado vivir en Amazonas fue posible extender la solidaridad que tanto necesitan estas zonas alejadas del país.
#ColombiaSeNota cuando trabajamos por los demás y en este caso se notó y se seguirá notando pues en próximos días se enviarán más de 26 toneladas de insumos y ayudas.
Nuestro equipo de viajeros retornó con la satisfacción de cumplir la misión, el cansancio hizo parte de la felicidad de ayudar. Finalizando el día volvió a tierra Antioqueña el vuelo de Viva Air que seguirá surcando los cielos del país para llegar a los parajes más lejanos con un mensaje de solidaridad y esperanza.
Todo esto fue una hermosa realidad que se dio gracias al esfuerzo de la Corporación Antioquia Presente, el SENA, la Fundación Bancolombia, la Cooperativa de Hospitales de Antioquia (COHAN), la Fundación Grupo Argos, BQA Consultores, el grupo de operaciones especiales en emergencias de la Policía Nacional (PONALSAR), Viva Air, la Corporación Universitaria Adventista, Way Group, Fundación Sura, Sociedad Antioqueña de Anestesiología (SADEA), Pisisí SA, Cristal SA, la Cámara de Comercio de Medellín, Postobón, Comfama con su equipo de empleados, Procter & Gamble, la Gobernación de Antioquia por medio de la Fabrica de Licores, Compañía de Empaques, Conconcreto y la ciudadanía en general.